
La evaluación de riesgo de desastres para Venezuela se ha enfocado en la amenaza por terremoto a nivel nacional e inundaciones a nivel cuenca. El objetivo principal ha sido identificar y cuantificar el riesgo de desastres ocasionado por ambas amenazas naturales en forma integral; incluye la estimación de la exposición de bienes de infraestructura, definición de vulnerabilidad para los componentes de dicha infraestructura y la evaluación del riesgo. Para el catálogo de riesgo sísmico se han tomado en cuenta 2,969 eventos registrados dentro del territorio nacional pero también considerando aquellos ocurridos en países fronterizos. Por su parte, para la evaluación de riesgo por inundación se realizó sobre la cuenca de la quebrada Chacaito que de forma complementaria para la evaluación del riesgo se han incluido elementos expuestos tales como cultivos, elementos bióticos o ambientales y en general cualquier tipo de elemento susceptible a sufrir daños por cuenta de fenómenos amenazantes.
Para la evaluación del riesgo sísmico fueron planteados una serie de escenarios de amenaza que representan de manera adecuada los efectos de cualquier evento de magnitud factible que se puede presentar en el área de influencia, la función de vulnerabilidad se efectuó en sistemas estructurales como son pórticos resistentes a momentos, sistemas combinados o duales, sistemas de edificaciones con muros estructurales, sistemas prefabricados y otros; de lo anterior se observó que El Estado del Amazonas al tener un valor expuesto bajo en comparación al resto del país (Bs 38,991 x106) y por estar ubicado en una zona sísmica de amenaza baja, Táchira y Vargas concentran valores de riesgo altos, pues son los estados con las curvas de amenaza más altas
Por su lado, la amenaza por inundación para el presente estudio ha sido cuantificada en términos de altura de agua (en metros), este caso las funciones de vulnerabilidad por inundación se encuentran mayormente relacionadas con el parámetro de altura, en número de pisos de las edificaciones, de lo que se observó que el riesgo por inundación es extremadamente bajo; la pérdida anual esperada representa tan sólo el 0.004 por mil del valor total expuesto. Esto también se ve reflejado en los valores de PML, los cuales no llegan ni al 0.01% para un periodo de retorno de 1000 años.